Benimámet es un poblado de Valencia, España. En esa localidad, nacería el 28 de junio de 1951 Santiago Calatrava. A sus 8 años estudio en la Escuela de Bellas Artes y fue participe en un programa de intercambio en una escuela similar en Paris. En su juventud, entro a estudiar arquitectura en la Universidad Politécnica de Valencia, ampliando sus conocimientos en Zúrich estudiando ingeniería civil. A lo largo de su carrera, logro importantes premios y reconocimientos, como lo son: Premio Nacional de Arquitectura, Medalla de Oro de AIA (American Institute of Architects) así como el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, entre una inmensa lista.
Anyway…
Comenzamos nuestro viaje de poniente a oriente. Nos dirigimos rumbo a Guadalupe entrando por Santa Catarina. Circulamos por Antonio L. Rodríguez viendo ese puente emblemático; parte orgullo regio, que es opacado por el casi inmortal Cerro de la Silla.
Coloquialmente llamado “Puente Atirantado”, el Puente de la Unidad, entraría en polémicas su construcción por el costo que resulto más alto del presupuestado. Monterrey y el país en materia de puentes urbanos, tenían su novedad.
En la calle Galileo 114 esquina con Horacio, en la Colonia Polanco en el Distrito Federal, se recibe una llamada. La referida dirección se trata de la embajada española quien es dirigida por el Cónsul José Ignacio Carbajal Garate. La llamada no se sabe si proviene de Doha Qatar, Nueva York, o Zúrich, lugares donde cuenta con oficinas Santiago Calatrava. Santiago denuncia al cónsul que presente una inconformidad por el plagio de una obra de su autoridad, llamada Puente del Alamillo, situada en Sevilla España.
No sería la primera vez que la urbe se robaría diseños, ya el Teatro Fidel Velázquez en Escobedo construido en el 94, imitaría al National Art Gallery de Washington de Ieoh Ming Pei. El arquitecto chino también seria copiado con el diseño de la escalera helicoidal construida en el vestíbulo de su Pirámide de Louvre; este diseño se construiría en el 94 en el vestíbulo del Museo de Historia Mexicana. Se los perdonamos, eran los 90s. La sociedad regia copiaba todo, hasta futbolistas como: Careca 2, Vaquero 2, Zinedine Gaytán, etc. (Perdón, este último ya es reciente)
Seguimos por Antonio L. Rodríguez circulando hacia Constitución. Uno de sus nietos, Gilberto L. Rodríguez, funda GLR Arquitectos, una firma que sería reconocida por sus diseños propios, no copiados como los antes mencionados. Entre sus mejores logros, se encuentran la Torre Miravalle, Urbania, las recién terminadas Magma Towers; estas últimas ganadoras en los A+Awards de Architizer con sede en Nueva York, los Iconic Awards con sede en Alemania y finalista del World Architecture Festival con sede en Singapur, del cual no resultó ganador, celebrándose el certamen del 4 al 6 del presente mes.
Don Antonio L. Rodríguez, había sido el presidente del patronato pro construcción de la iglesia de la Purísima Concepción de Monterrey. Don Antonio, había invitado al arquitecto Enrique de la Mora Palomar para dicha obra en 1939. De la Mora posteriormente construiría la rectoría del Tec de Monterrey. Gomes Morín quien le presentaría el proyecto del Tec a Don Eugenio Garza Sada, entablo una estrecha amistad entre De la Mora y la familia de Don Antonio. Los padres de Gilberto, le encargaron a De la Mora ya a punto de retirarse el diseño de su casa. Fue ahí donde Gilberto de apenas 9 años, comenzó a enamorarse de la arquitectura.
No todos los descendientes de la familia de Don Antonio L. Rodríguez fueron unos santos. Al morir Don Antonio, su inmensa fortuna paso a sus hijos. La fortuna la había logrado en gran medida gracias a muchos abusos de confianza según cuentan las leyendas urbanas.
Pasamos la Macroplaza y nos dirigimos a Guadalupe; Sobre la misma, ya pasando Constitución y transformándose en el Boulevard Miguel de la Madrid, se encontraban unos terrenos de Don Antonio L. Rodríguez. Respetando la tradición regiomontana de que a toda tierra la quieren hacer Santa, llamaría a esos terrenos San Rafael, debido al cariño que le tenía a uno de sus nietos con el mismo nombre.
No todo era felicidad en arquitectura con los Rodríguez. El bisnieto de Don Antonio L. Rodríguez, llamado de igual forma, fallecería en los 80s a causa del derrumbe de un edificio.
Belisario Rodríguez, hijo de Don Antonio L. Rodríguez, nunca trabajo en su vida, vivió siempre de la herencia de su padre. Sus hijos Rafael y Ricardo Rodríguez, heredarían la empresa RYT, una reconocida marca de Shampoo´s regiomontana de los 70s y 80s.
Los orígenes de RYT son turbios. Filial a la marca ROUX de Francia, -sí, aquellos que desde los 30s son líderes en tintes para cabello- la empresa se formó a raíz de dos inversionistas: Rodríguez y Torres. Para solventar sus operaciones, RYT tomarían un préstamo de la red bancaria que controlaba Don Antonio L. Rodríguez. Los Torres vendieron su parte al Sr. Rodríguez. A este le gano la depresión ya que uno de sus hijos se mataría en un accidente carretero. Por este motivo, descuido su empresa aprovechándose Don Antonio L. Rodríguez haciéndose de ella, heredándosela a Rafael (el nieto con nombre de colonia) y a su hermano Ricardo Rodríguez
Al fundarse Monterrey el 20 de septiembre de 1596, las tierras del oriente pertenecían a Diego de Montemayor y familiares, quienes nunca hicieron uso de las mismas. Fueron abandonadas en 1627, cuando fueron cedidas a los hermanos Diego y Juan Solís; hijos de Martín de Solís y Francisca Ávila. Juan estableció la Hacienda Santa Cruz donde hoy se encuentra la Presidencia Municipal de Guadalupe, la cual vendió en 1658 al Capitán Nicolás Ochoa de Elejalde, mismo que le cambio el nombre por el de Hacienda San Agustín. Ochoa de Elejalde fue mal prácticamente de las congregas, por lo que se desprende la siguiente historia…
Canek, o Ah Kaan Ek, o Kan Ek', es el nombre de los gobernantes del pueblo maya de los itzaes. Un Canek había recibido a Hernán Cortes en sus tiempos. En 1697, el Canek de aquella época, fue derrotado por Martin de Urzúa dominando a los Mayas en la región de Petén (Guatemala). Martin de Urzúa, después de terminar su gestión en Yucatán, se hizo cargo de la Capitanía General de Filipinas, falleciendo el 4 de febrero de 1715. Había dejado viuda a Doña Juana Rosa Bolio Ojeda y Guzmán.
Francisco Antonio de Barbadillo Vitoria, era el asesor del Gobernador de Yucatán, Don Martin de Urzúa.
El 35º Virrey de la Nueva España, Fernando de Alencastre Noroña y Silva, llevo dos expediciones a Texas donde fueron establecidas varias misiones, y donde se fundó una colonia en el Nuevo Reino de León llamada San Felipe de Linares, conociéndosele al Virrey Fernando, “Duque de Linares”.
Francisco Antonio de Barbadillo se desempeñó en México como alcalde de la Real Sala del Crimen. Cuando el supervisor apostólico del Tribunal de la Inquisición visito el Reino de león, se dio cuenta que había ministros con múltiples cargos en el Real Consejo de Indias, por lo que se le reporto al Virrey Fernando de Alencastre los problemas de la región. Alencastre convoco a una junta de guerra y hacienda en la que resolvieron enviar a Monterrey a Francisco de Barbadillo.
Francisco llegaría a Monterrey el 28 de diciembre de 1714. Organizaría la “Compañía Volante”, misma que servía para garantizar la seguridad de los pueblos y las haciendas de pastoreo. La seguridad obviamente era establecida en referente a los nativos aun rebeldes y sin cristiandad. La encomienda era poblar nuevas colonias con nativos. Fue acompañado por el Capitán Juan Guerra Cañamar y de Fray Juan de Losada. Los “indios” que habían huido de las misiones, fueron traídos de la sierra de San Carlos en Tamaulipas, siendo alrededor de 5000. Ya convertidos, repoblaron la misión de San Antonio de los Llanos (Hidalgo Tamaulipas) repobló la misión de San José y Santa María de rio Blanco (Zaragoza y Aramberri) Labradores (Galeana) Hualahuises y Gualeguas, además, fundo en las inmediaciones del Valle del Pilón, las misiones de Purificación y Concepción (Montemorelos)
Con los indios restantes, unos 1000, fundaría el 5 de febrero de 1715 el “Pueblo de la Nueva Tlaxcala de Nuestra Señora de Guadalupe de Horcasitas”. Lo último en honor al Virrey Don Juan Francisco Güémez de Horcasitas, 41º Virrey de la Nueva España.
Tlaxcaltecas no eran, más bien eran tribus chichimecas, dentro de las que se encontraban: Pamoramos, Guaripas, Pelones, Cadimes, Pames, Comepescados, entre otros.
Para el 27 de agosto de 1719, Francisco se convertiría en Gobernador del reino. Juana Rosa Bolo Ojeda y Guzmán, -la viuda de Martin de Urzúa-, no perdería tiempo, se casaría el 29 de septiembre de 1723 con Francisco Antonio de Barbadillo Vitori, el ex asesor del Gobernador de Yucatán.
Barbadillo murió el 14 de mayo de 1726 en la ciudad de México, dejando pagadas 500 misas por su alma. Fue sepultado en el mismo lugar en que posteriormente lo sería Fray Servando Teresa y Mier, pero de él hablaremos ya que nos adentremos al centro de ciudad capital.
De Antonio L. Rodríguez pasamos por Constitución y posteriormente por el boulevard Miguel de la Madrid. Doblamos por la derecha en la avenida México. Hoy con justa e inmerecida razón de tardanza, por fin a Don Israel Cavazos el municipio opaco de Guadalupe lo honra con una de sus avenidas. Quizás por compromiso por haber nacido en ese municipio las autoridades municipales lo honraron con esa distinción; aunque bien merecido tiene Don Israel, ocupar un lugar en la historia urbana de alguna de las avenidas importantes de Monterrey.
En el 2009 fue condecorado con la Insignia de la Orden de Isabel la Católica en grado de Encomienda por el Gobierno de España. Nunca en la historia neolonesa, se le ha debido tanto a tan pocos hombres que han forjado la memoria de los cimientos que llevaron a entendernos como cultura, como a la que le ha dado forma Don Israel Cavazos.
Otro Cavazos Guadalupense se encuentra al sur, por donde doblamos a la derecha.
Héctor Cavazos y Enriqueta Ramírez, bautizarían a Eloy Cavazos bajo el ritual auspiciado por el Arzobispo de Monterrey Guillermo Tritchler. Los Cavazos era una familia modesta que habitaba en la Plaza de Toros Guadalupe, la cual estaba ubicada por la calle Jiménez en la colonia Paraíso. Ahí Héctor se encargaba de la Plaza, el cual era el patio del pequeño Eloy, el mismo redondel. Fue así que Eloy les perdió el miedo a los innumerables toros de lidia que circularon por esos corrales. Para sus 9 años ya toreaba sus primeras vaquillas. A sus 15, su hermano Héctor se había dado un tiro en la cabeza, nunca se supo las razones que tuvo para quitarse la vida y que seguramente, impacto sobremanera en la mente del joven Eloy, quien a sus 16, ya alternaba con los mejores toreros de la época; estamos hablando de 1966.
El impresionante record en la tauromaquia internacional, llevo a Eloy a contar con su nombre en una de las avenidas de Guadalupe. Posteriormente ya retirado, sus problemas familiares salieron a flote donde su personalidad supuestamente agresiva, quizás sería marcada por el suicidio de su hermano.
Bajamos por Lázaro Cárdenas, ese hombre que comenzó a cosechar el fruto de la Revolución y que tan pronto comenzó, fue cegado su ideal en corrupción la cual digerimos hasta nuestros días.
Agarramos Pablo Livas, aquel destacado profesor nacido en Marín, radicado en el Cercado Nuevo León y que comenzaría a ejercer en Doctor González, además profesionalizado en Monterrey y fallecido en Laredo Texas. No tenía absolutamente nada que ver con Guadalupe, pero ahí tenía su avenida y tenía que pasar por ella para dar con Serafín Peña.
La Estancia de los Lermas, seria fundada en 1598 por Fray Cabrían de Acevedo. Posteriormente el 16 de noviembre de 1612, la Hacienda de San Sebastián seria fundada por el portugués Juan Pérez de Lerma, así como por su esposa Mariana Martínez. A juan Pérez sus propios “indios” incurrieron en su morada dándole un flechazo en el estómago. Mariana al ver la agresión salió de casa para arrastrar a su esposo a los adentros de la vivienda. Mientras lo hacía ya por la puerta de la vivienda, una flecha le dio a la valiente mujer en el tobillo y otro en el rostro. Ambos sobrevivieron a sus heridas.
Anyway…
Nacido en la Hacienda San Sebastián de los Lermas, -de ahí que San Sebastián, que cruza de norte a sur de Eloy Cavazos a Pablo Livas se llame de esa manera-, Serafín Peña se destacaría en el ámbito educativo, influenciando sus ideas para la Reforma Escolar de 1892 bajo el mando de Miguel F. Martínez. Ambos, fueron directores de la Escuela Normal en los primeros comienzos de esta, y por sus aportes, fueron nombrados el 20 de mayo de 1918, Beneméritos de la Educación Nuevoleonesa.
Pablo Livas y Eloy Cavazos se juntarían al poniente en la Pastora.
Juan López firmaría como testigo en el acta de fundación de Monterrey. Se le habían concedido a merced unas tierras el 15 de febrero de 1598 por lo que fundaría lo que hoy conocemos como La Pastora, despoblada para 1626 por causa de la guerra contra los “indios”.
Más adelante, la intersección se convierte en la avenida Chapultepec que desemboca en el Ancón del Huajuco, compuesto por la colonia del mismo nombre, la Buenos Aires y la colonia Caracol. Los cañones tienen entradas, por lo que a estas se le conocen como bocas. A los rincones de las montañas se les llama Ancón, de ahí el nombre de Ancón del Huajuco.
¿Pero cuál es el cañón del Huajuco? Al cañón lo comprende la Sierra de la Silla y la Sierra Madre. Seria llamada así por aquel cacique “indio” de nombre Cuaujuco o Guaxuco, quien dominaba todo el cañón con su tribu Huachichil; que Quachíchitl en náhuatl significa “cabeza pintada de rojo”. Huajuco fue el primero en atacar Monterrey el 8 de febrero de 1624 junto con Colmillo. Debido a su conversión religiosa y por los intereses de la Corona, se le nombra al Valle por su nombre. Posteriormente en 1726 se le llama “Santiago del Guaxuco”, y para 1825, “Santiago”.
Salimos por Morones Prieto pasando la colonia Independencia, conocida anteriormente como el “Barrio San Luisito”, ya que muchos de sus habitantes provenían de San Luis Potosí. Era antes de esa población una zona de pastoreo de cabras. A la Nuevo Repueblo, se le llamo así por “Repueble del Sur”, zona donde obviamente comenzaron a poblar el lugar.
Nacido en Linares, Morones Prieto fue Gobernador de Nuevo León. Fue un destacado médico y con amplias posibilidades de ocupar la Presidencia de la Republica. También fue nombrado director del IMSS de 1966 a 1970. Impulso la creación de 2 plantas termoeléctricas y en su gestión se hizo la carretera Galeana San Roberto, erradico en el Estado el Paludismo, amplio al doble la Plaza Zaragoza y canalizo el rio Santa Catarina. Todo ello no creo que merezca tan importante avenida pero pues bueno.
Doblamos hacia Manuel Gómez Morín. A mano izquierda podemos apreciar San Agustín.
San Pedro desde su fundación se integraba por los asentamientos:
Rancho San Agustín.
Rancho Carrizalejo.
Molinos de Jesús María.
Fábrica de hilados La Leona.
Hacienda La Decima.
Hacienda Santa Engracia.
Hacienda del Rosario.
Hacienda Santa Bárbara.
Hacienda de Montes.
Hacienda de Capellanía.
Hacienda de los Dávila (Tampiquito).
Hacienda del Coronel Cerón.
Hacienda San Pedro.
Los sampetrinos honrarían a ilustres personajes de la vida empresarial, hombres que forjaron el Monterrey moderno, algunos déspotas, algunos con una moralidad integra, otros con ideología nazi.
CONTINUARA…