El 24 de noviembre de 1939, decretado por el entonces Presidente de México, Lázaro Cárdenas, el Parque Nacional Cumbres de Monterrey quedo protegido como una reserva ecológica. Contaba en su inicio, con un área de 245,000 hectáreas.
El gobierno de Lázaro Cárdenas pensaba en todos los aspectos no solo del presente, sino del futuro. Así fue, como se trazó el Parque Nacional considerando el crecimiento de la ciudad, salvaguardando la flora y fauna que en sus alrededores y al interior, habitaba.
En aquel tiempo, partía de Lazarillos por la carretera nacional hasta Los Cristales, de ahí, parte a las cumbres más altas de la sierra de La Silla. Su delimitación pasaba por Guadalupe, llegando hasta Santa Rosa en Apodaca. Todo el Pesquería, río arriba, su delimitación seguía hasta llegar al Fraile, y bajaba sobre el río de los Muertos, ubicado en el Valle Perdido, hoy origen del Pesquería, o Nacataz. Seguía por los Fierros, Rinconada, y de ahí partía los límites de Coahuila y Nuevo León llegando hasta la Camotera, al sureste de Laguna de Sánchez. De ahí partía hasta Potrero Redondo y a noreste llegaba a las Adjuntas, para posteriormente terminar en Lazarillos.
Los municipios que abarcaban en parte o en su totalidad, al Parque Cumbres de Monterrey, eran Allende, Santiago, Guadalupe, Apodaca, San Nicolás, García, Escobedo, Monterrey, San Pedro y Santa Catarina.
El 20 de agosto de 1909, se forma un ciclón en la Isla de Barbados. Este, hace su camino destructivo por Puerto Rico, Jamaica, Haití, y parte de Cuba. A 160 kilómetros por hora, pasa por Yucatán.
Miércoles 25 de agosto de 1909. Monterrey recibe aquellas aguas. No esperan que sean de gran magnitud. Apenas 14 días atrás, fuertes lluvias los agobiaron después de una intensa sequía que había durado 3 años. Los viejos no se esperaban tal magnitud en las aguas, debido a que dichos fenómenos ocurrían en la ciudad cada 25 a 30 años.
Son las 4 de la tarde de aquel miércoles, comienza a llover tranquilamente. Al siguiente día, el jueves, la lluvia se volvió torrencial, yendo y viniendo la fuerza ocasionalmente.
Es viernes. A la una de la tarde comienza a caer la verdadera tormenta, no para hasta el domingo. En el transcurso, la gente aledaña al río, comienza a trasladarse al Palacio Municipal, y al kiosko de la Plaza Zaragoza. Los del Barrio San Luisito, suben a las faldas de la Loma Larga.
Los tranvías se suspenden. Las aguas suben en Cuauhtémoc, Aramberri, Escobedo y 5 de Mayo, alcanzan hasta los 25 centímetros por encima de las vías.
Son las 8 de la noche del viernes 27. San Luisito queda incomunicado. Para las 9, las primeras casas son derribadas por las aguas. Media hora después, los postes de luz caen y San Luisito queda en penumbras.
Es ahí cuando comienza la verdadera desgracia. Algunos se suben a los techos, otros dejan sus casas para dirigirse a la escuela, la cual también es llevada río abajo. Cayeron 340 milímetros de lluvia, 60 más que el huracán Patricia, el supuesto más fuerte en la historia mundial.
El Santa Catarina ruge de nuevo, esta vez la virgen María no podrá parar sus aguas como sucedió en 1756, cuando Antonia, aquella zapatera de origen Tlaxcalteca, pidió que se aplacara la furia del río; milagro que dio origen a que construyera en su propiedad una capilla a la virgen, misma, que sería los cimientos de la hoy Basílica de la Purísima.
La superficie urbana inundada en Monterrey, ronda las 209 hectáreas. Tan solo en la ciudad, hay 3 mil muertos. La cifra se duplica en todo el estado.
Lunes. La peste ronda por doquier. Los cuerpos son enterrados en fosas comunes, otros, son cremados para evitar epidemias.
Bernardo Reyes se encuentra fuera del Estado. La catástrofe le impide regresar a la ciudad de Monterrey. Cuando puede, su suerte está echada. A los dos meses, abandona el cargo como Gobernador y se destierra a Paris.
A los pocos días de la tragedia en Monterrey, en septiembre, Emiliano Zapata es elegido Calpuleque de la Junta de defensa de las tierras de Anenecuilco. Con dicho nombramiento, comienza a analizar documentos con origen en el virreinato, que acreditan los derechos de propiedad de esas tierras negados por las Leyes de Reforma. Debido a esos estudios, se convertiría en dirigente agrario de Morelos, convirtiéndose tras la Revolución, en el principal impulsor de la Reforma Agraria.
La conserva del Parque Cumbres de Monterrey, tenía como origen mantener el equilibrio climático debido al clima riguroso con el que cuenta la ciudad de Monterrey, atenuándolo para asegurar la buena salud de sus habitantes. También consideraba, salvaguardar los habitantes aledaños al cauce del río Santa Catarina por posibles inundaciones. Desde aquellos años, se consideraba la potencialidad de la zona para con el turismo. También, se buscaba proteger por el descontrol que se estaba viniendo en las tierras, tras la Reforma Agraria.
Nunca se habían entregado tierras como lo hizo Lázaro Cárdenas, bajo el auspicio por lo que tantos mexicanos murieron en la Revolución. La Ley Agraria de 1915, tras la Reforma, impulsaba a los ejidos, mismos, que podrían poner en descontrol el salva guardo del Parque Cumbres de Monterrey.
Tras la sucesión de Lázaro Cárdenas, Manuel Ávila Camacho en 1942 decreta que existe un prejuicio para la economía de la región, permitiendo el cultivo en pendientes menores a los 10 grados.
Fueron décadas de descontrol, lo que llevo a la Dirección General de Aprovechamiento Ecológico de los Recursos Naturales, solicitar en 1993 al ITESM, en colaboración con la Ducks Unlimited de México, y la UANL, un estudio para abordar los problemas del Parque, redelimitar el mismo, así como un programa para su manejo. Dicho estudio fue presentado a la SEDESOL, comenzando así un convenio entre esta dependencia y el Tecnológico de Monterrey.
La institución educativa, proponía cambiarlo a categoría de “Reserva de Flora y Fauna”, para incorporar una normativa de manejo de los ecosistemas y su biodiversidad acorde a las actividades económicas. Instaba también, crear un programa general de manejo, en base en una zonificación que discriminara los sitios más apropiados para el uso agrícola, pecuario, urbano, de protección y restauración ecológica, diversificar las formas de uso y aprovechamiento del Parque para lograr un crecimiento racional y un manejo integral.
La propuesta no procedió de inmediato. Pasaron años para que se tomara en cuenta. En 1996 el ITESM incluyo una propuesta de ordenamiento ecológico y modelos para el manejo sostenible del mismo, por lo que se incrementó la zona, abarcando parte de Ramos Arizpe, Arteaga, y Saltillo.
Para el año 2000, en respuesta de la petición del Gobierno del Estado, se publicó el decreto en el que se redelimita el Parque Nacional Cumbres de Monterrey, basado en la propuesta del ITESM, derogando los decretos de 1939 de Cárdenas, y de 1942 de Camacho.
La nueva geografía del Parque, abarca los municipios de Allende, García, Montemorelos, Monterrey, Rayones, San Pedro, Santa Catarina y Santiago.
Hasta aquí todo suena de maravilla. El aseguramiento de las áreas protegidas seria una garantía para las nuevas generaciones. Todo es felicidad para los ecologistas y se escucha a lo lejos una melodía de esperanza, donde una bella voz con tono parecido al de Natalie Merchant, canta para que los osos felices coman un delicioso pingüino de la Marínela, a manos de un eco turista.
¿Pero que tiene que ver el Estadio BBVA Bancomer con todo esto? Es sencillo, el poder y la avaricia, además de la alta plusvalía que buscan los líderes empresariales regios, llevaría al genocidio ecológico en los alrededores de la urbe. El estadio, era la firma y señal de que harían lo que se les diera la gana sin que nadie pudiera detenerlos.
La historia nos remonta a 1945, 3 años después del decreto de Ávila Camacho para con el Parque Cumbres de Monterrey. En aquel entonces, del 25 al 31 de marzo, se celebraría el Campeonato Nacional de Futbol Amateur en el Estadio de Béisbol Cuauhtémoc y Famosa. Tres meses después, se crea oficialmente el Club de Futbol de Monterrey, con la base de aquellos jugadores que habían ganado aquel torneo. Para diciembre de ese mismo año, el equipo viaja a Guadalajara y sufre un desperfecto el autobús el cual termina incendiado, provocando graves heridas a jugadores donde incluso, en un par de ellos, fueron las causantes de su fallecimiento. El equipo se desmorono moral y organizacionalmente, por lo que se retiró de la liga de manera voluntaria el 23 de junio del 46. Para 1952, el 14 de julio el equipo vuelve a la recién creada segunda división bajo una nueva administración, tras las protestas de los demás equipos, por la lejanía de la sede para con las propias. Para el torneo del año 55-56, ganan el campeonato de la segunda, por lo que suben a la primera división.
En la década de los 70s, el equipo fue apoyado por 7 de las principales empresas de Monterrey, reunidas por Alberto Santos de Hoyos. A principios de los 80s, PROTEXA adquiere el equipo debido a los malos manejos. Posteriormente en 1989, vende el equipo a los empresarios Jaime y Manuel Rivero Santos, quienes fundarían en 1994 el Banco Banregio. Dos años atrás, venden el equipo a ABACO, mismo que le confisca su propiedad la Secretaria de Hacienda, tras encontrar un desfalco en el Grupo Financiero de más de 170 millones de dólares. Eso en el 97, para el 2000, FEMSA que se había retirado de Sinergia Deportiva en alianza con CEMEX, cuando ambos se hacían cargo del Club Tigres, adquiere de Hacienda al Club de Futbol Monterrey.
Ambas empresas habían encontrado la fórmula del futbol regiomontano. El control de masas por medio de la cerveza, la grilla, uno que otro chispazo de campeonato para mantener la cordura, el orden, y sobre todo la taquilla, harían el negocio que tanto le cuestionaron en un principio los accionistas de CEMEX a Lorenzo Zambrano, cuando estaba empecinado en hacerse cargo de Tigres.
La avaricia que menciono en párrafos anteriores, y que combina el daño ecológico desmedido con entretenimiento protagonizado por las principales empresas regiomontanas, comenzaría en los 80s.
Se comenzaron a desarrollar planes para la “invasión” de terrenos en Chipinque. Algunas propiedades fueron adquiridas de manera ilegal, bajo los preceptos de no urbanización en pendientes de más de 10 grados, y que se estaba violando en ese aspecto en toda la urbe. El municipio de San Pedro insto al Gobierno Estatal, que iniciara los trámites con la Federación para la expropiación de la zona para su protección. Este lo logra el 9 de agosto de 1990, y para el 92, se crea el Patronato Estatal y Privado que garantizaría su “protección”. Por el lado privado, estaban representados en el patronato los Holdings de CEMEX, FEMSA, ALFA, CYDSA, IMSA, así como PULSAR. Para el 2003, se une al Patronato el municipio de San Pedro, donde comenzaría a urbanizarse parte del Parque solo para prominentes empresarios con preferencias.
Tras la compra de FEMSA del Club de Futbol Monterrey, paralelo a ello, se delimita la nueva geografía del Parque Cumbres de Monterrey. De las 245 mil hectáreas que estaban en el primer decreto con Cárdenas, ahora solo contaba con 177,394 hectáreas. Las reservas ecológicas en Nuevo León son solo el 2% del 20% con que contaba en tiempos de Lázaro Cárdenas. La zona metropolitana en ese transcurso, perdió 300 arroyos. Para colmo, la administración de Rodrigo Medina cede a comodato por 60 años, parte del Parque La Pastora para la construcción del estadio BBVA Bancomer. Algunos ecologistas no comparten la idea de que el gran negocio radica en la inversión inicial para su construcción, sino en la futura adquisición de agua de los mantos acuíferos, donde la industria cervecera, necesita 6 litros de agua para producir uno de cerveza.
Después de los supuestos estudios para edificar el estadio, donde se consideró de manera estúpida el patio aledaño de la colonia Victoria en Monterrey, y sin vialidad financiera, al considerar aun de manera más estúpida, los patios de ferrocarriles en concesión por 50 años, renovables hasta por un siglo, a Kansas City Southern de México, FEMSA, en el trayecto de sus inversiones corruptas, dieron en el clavo en una de las administraciones municipales más corruptas de la zona metropolitana sin importar el partido que la administre, Guadalupe. Ivonne Álvarez, acostumbrada al dinero fácil después de la llegada de los Zetas a la ciudad, tras el traspaso de la bandera de Cristina Díaz, quien les dio entrada, daría todas las facilidades municipales para que se instalara el estadio en dicho municipio.
Iniciaron los trámites para la edificación en base a una autorización con irregularidades, mismas, que violan la construcción del inmueble.
La empresa diseñadora de la obra, se trataba nada más y nada menos que de la firma Populous. Esta tenía su sede precisamente en la ciudad de Kansas City. Ahora, supongo FEMSA en su ignorancia, fueron a tocar las puertas de los patios de la Kansas en Barragán, donde algún ejecutivo los asesoro mencionándoles que conocía a unos camaradas que hacían estadios, y que seguramente los asesorarían.
FEMSA dio con dicha firma y alisto el financiamiento de la obra por medio de su filial BBVA Bancomer. Recordemos que Don Eugenio Garza Sada, creo la Compañía General de Aceptaciones, la cual se sumaría al Banco de Londres formándose así, Banca Serfin. Después se aliarían a Santander surgiendo Grupo Financiero Santander Serfin. Por otro lado, FEMSA estaba también familiarizado con Bancomer, después de la privatización de la Banca promovida por Carlos Salinas de Gortari, Bancomer es adquirido por Vamsa-Visa, a cargo de Eugenio Garza Lagüera. Estos se afiliarían al Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, tras los activos transferidos de BBV-Probursa, integrándose también al holding financiero, Banca Promex.
FEMSA no pondría ni un peso de sus activos, la inversión pasaría a los pasivos generados a través de sus filiales bancarias a largo plazo. Por si fuera poco, se hacían aún más fuertes tras vender sus acciones a Heineken International, por un monto de 7347 MDLL, a cambio de un 20% de su participación en la holandesa.
La afición, feliz. Aunque en base a la sangre de desprecio regio, por las raíces judías, no querían el estadio en Guadalupe; esa ciudad gestada a partir de la colonización de Tlaxcaltecas. La emoción les gano. Nunca pensaron en el daño ecológico y la falta de pulmón en la ciudad. El tema de la tierra de “indios” no les importo más, sobre todo, porque ya se estaban haciendo a la idea, de que FEMSA para nada los tomaba en cuenta, aunque todos querían participar.
Y sí, todos participaron. Populous les aventó el diseño para que se hicieran garras. FEMSA no revisaría la estructura y diseño, debido a que su personal a cargo se encontraba peleando los asuntos legales y dando los moches necesarios para comenzar. La Secretaria de Desarrollo Sustentable al estar ya pagada, nunca reviso el proyecto en materia de vialidades, incrementación de temperatura en la zona, contaminación visual, y mucho menos, la sofocación que provocaba el interior del inmueble. Incluso, antes del comienzo de uno de los partidos ya construido el estadio, un aficionado murió en uno de los pasillos al parecer por infarto, o sofocación.
Maíz Mier comenzó con la nivelación y desmonte del área de construcción, además de la pavimentación. Garza Ponce se centró en establecer la cimentación para las columnas. Como esta constructora no tenía experiencia en el acero, subcontrato a una experta para que hiciera las columnas. Mier recomendó que la empresa que hiciera la cimentación fuera la encargada de hacer las columnas, ya que de lo contrario, podrían tener problemas de ensamblaje. El GPS fallo los cálculos y las columnas no quedaron, por lo que la construcción se retrasó.
Mientras tanto, la afición impotente ante los malos resultados de su equipo, se manifestó en el estadio en construcción para protestar por el bajo desempeño.
La estructura comenzó a tomar forma, se veía muy moderno, de vanguardia, como para instalarse en Londres con ese clima templado que tanto antoja. Pero no, el inmueble estaba en Monterrey y con el intenso calor, agobiaba. Comenzaron a despreciar el estadio, sobre todo porque tenía forma de bacinica para orinar.
El famoso estadio se inauguraría tras una serie de fallos en su infraestructura eléctrica. Populous les había dejado todo en orden, pero la falta de organización y sinergia con el municipio y las dependencias federales como CFE, llevarían al colapso del sistema en los alrededores.
Las vialidades se saturaron como ya se tenía previsto, y el metro no se daba abasto. Por si fuera poco, el puente que trasladaba hacia el metro a la afición, se tambaleaba y amenazaba con derrumbarse. Se dejaron de cosas y contrataron a unos expertos. Se fueron a la grande, mandaron llamar a los alemanes para que amortiguaran la construcción.
El grupo ciudadano “Colectivo en defensa de La Pastora”, interpuso una demanda en el 2011 contra la Semarnat, cuando se autorizaron los permisos para su construcción. El colectivo manifestaba que el Manifiesto de Impacto Ambiental, estaba lleno de irregularidades por lo que en caso de que se anule, se tendría que proceder a la demolición. Una de las principales irregularidades, era que la ubicación del predio estaba ubicado en terrenos de Cadereyta, al ser señalados topográficamente erróneos desde su delimitación, en la administración tan pulcra dicen algunos, de Alfonso Martínez Domínguez.
El fallo correrá a cargo de los 11 Magistrados de la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa. En caso de que fallen a favor de los demandantes, la Semarnat con el apoyo de FEMSA, interpondrá un amparo para alargar el asunto y no demoler el inmueble.
Pepe Maíz, de Maíz Mier, sugirió que para aminorar el calor al interior del estadio, se impermeabilizara la estructura inferior. Mhoni vidente, también entraría en el mitote, al afirmar que el estadio no estaba embrujado por aquella gallina negra que los albañiles Tigres enterraron en sus cimientos, -que por cierto algunos murieron-, sino que estaba encantado, situación que había llevado al equipo a su mala racha, a los fallos eléctricos, y al puente colgante dañado, además de los muertos que provoco.
Anyway…
Pero bueno ¿Qué paso con el Parque Cumbres de Monterrey?
El Parque Cumbres de Monterrey siguió con su delimitación establecida en el 2000, a instancia del ITESM. Aquí el problema surge, tras las corruptelas de los empresarios de crear a gran escala el ecoturismo en la zona. Inversionistas de Nueva York veían la posibilidad de la creación de un gran hotel en Santiago. La inversión y explotación en la zona masiva, se tenía prevista para la entrada a la Gubernatura de Ivonne Álvarez, pero al no ganar, se detuvo la inversión por parte de la Federación. Ya con Jaime Rodríguez en la administración estatal, no dudo que en tres años FEMSA y las demás corporaciones que apoyaron su campaña, metan mano en el asunto.
En los últimos 3 años, el cáncer en niños regiomontanos se ha incrementado en un 375%. Monterrey se convirtió en la ciudad más contaminada del continente. Los nacimientos prematuros se incrementaron y todo esto, mientras el promedio se divierte al interior de un estadio de futbol moderno mal construido. Aunque quizás hecho con inteligencia, para incrementar la ingesta de cerveza de quienes viven sometidos, por los que crearon la imagen del sueño regiomontano.
Solo unos pocos valientes se enfrentaban ante los conglomerados industriales y políticos corruptos, como el ecologista Guillermo Martínez Berlanga, quien en su lucha constante ha recibido amenazas de muerte, fracturas en costillas, e infinidad de ataques psicológicos para que aminore su muchas de las veces, solitaria lucha.
En la actualidad, Nuevo León cuenta con 36 Áreas Protegidas, de las cuales 9 son Federales. Estas suman 7.3% de su territorio. El Estado, cuenta con la menor superficie de Áreas Protegidas en el noreste del país, ya que Coahuila protege más del 13% de su territorio, y Tamaulipas más del 10%.
El Parque Nacional Cumbres de Monterrey, sufre una deforestación de 3 hectáreas diarias. Este provee el 40% del agua que se consume en la ciudad, el resto, proviene de otras sierras protegidas como Nacataz, El Fraile, o La Silla.
El Parque Cumbres de Monterrey, es el parque terrestre más extenso de México, representa el 12% de la superficie de Parques Nacionales. Fue declarado en el 2006 Reserva de la Biosfera, por parte del programa Man and Bioshere de la UNESCO.
Todo esto sucedía mientras el regio promedio, olvida su dura semana laboral bajo el cobijo de unas cervezas, mientras sus hijos mueren lentamente, y los que están por venir, probablemente nacerán prematuros.