Capítulo 7. Narco política regia.

El artículo 2 de la Ley Orgánica de la Armada de México, establece que los Marinos tienen autorización para proteger las instalaciones estratégicas del país en su ámbito de competencia, y donde el “Mando Supremo” lo ordene.

 

El Senado de la Republica aprueba la reforma a la ley el martes 2 de marzo del 2010. El impacto que tendría en la urbe de Monterrey sería tan sustancial, que los sampetrinos 5 años después, por ignorancia quizás, a pesar de su alta cultura y estudios, votarían para Alcalde a Mauricio Fernández Garza, a pesar de su falta de propaganda en la campaña del 2015.

 

Es jueves 4 de marzo del 2010, me despierto al sonar de los MI17 Rusos que hacen operativos en la Constituyentes de Querétaro. En tierra, los Land Rover de la Marina, trasladan a varias personas para su interrogatorio al UDO de San Nicolás. El Gobierno de Carlos de la Fuente, le ha prestado las instalaciones de la Unidad Deportiva Oriente a la Marina como campo aéreo y operativo.

 

La Marina mantiene un operativo constante en la urbe desde las 8 de la mañana. Sus indagatorias en el Barrio Antiguo de Monterrey, los han guiado a una pesquisa masiva donde el UDO se convierte en campo de guerra al ir y venir de los MI17 Rusos, quienes ofrecen cobertura aérea. Los Land Rover en compañía de Suburban`s de color blanco, frecuentan la López Mateos y la Conductores de San Nicolás.

 

Es el segundo operativo de la Marina en la ciudad, el primero había sucedido el 4 de diciembre del 2009. Una investigación generada en Tamaulipas, los había llevado a Juárez Nuevo León donde cae abatido Ricardo Almanza Morales, el “Gori 1”, presunto autor intelectual de la ejecución del General Brigadier Juan Arturo Esparza García, Secretario de Seguridad de García, el pasado 4 de noviembre.

 

El jueves 4 de marzo del 2010, los marinos decomisan en el barrio antiguo 250 cajas de licores, entre whisky y tequila piratas. 2 días después, decomisan en el centro de la ciudad en una imprenta, 540 cajas. El licor se destinaria para surtir a los antros y bares del centro de la ciudad, donde los negocios ya habían sido advertidos de comprar dichos licores, o en caso contrario, serian incendiados sus negocios como represalia.

 

Las indagatorias de la Marina en el UDO, los llevan a la captura el 11 de marzo de Rogelio González Heredia, alias el “Roy”, Director de Alcoholes de Monterrey. González Heredia está ligado con el hijo del ex Gobernador Alfonzo Martínez Domínguez, mentor y padrino político del entonces Alcalde de García Jaime Rodríguez Calderón, actual Gobernador electo. Sus nexos también lo ligan con el ex Gobernador Natividad González Paras, así como los ex alcaldes de San Nicolás Fernando Larrazábal y Miguel Ángel García.

 

Rogelio González Heredia cuenta con una investigación por espionaje y fraudes financieros. Su pasado se remonta a los 90s, donde había operado una mafia de falsificación de devoluciones fiscales, junto con un contador, un licitador de Hacienda, así como un empresario farmacéutico. Con las ganancias de esas operaciones pensaba traer a México la gira de Disney. Al acabársele los fondos para la inversión de ese negocio, comenzó a intervenir las líneas telefónicas de sus socios. Por la experiencia obtenida en esa operación, crea la empresa High Security, convirtiéndose prácticamente en un caza recompensas. Su empresa fue la que informo el paradero del cuñado del ex Gobernador Sócrates Rizzo, Humberto López Muñoz y del que fuera rector de la UANL Manuel Silos, detenidos por agentes en Guadalajara en un domicilio perteneciente a Luis Flores, ex jugador de los Tigres de la UANL.

 

Manuel Silos era protegido por el entonces Gobernador Sócrates Rizzo, había sido recomendado por el ex Secretario de Hacienda Pedro Aspe Armella, quien gozaba de tener su rostro en una fotografía en el piso 8 de Rectoría. El Vo. Bo. lo haría Carlos Salinas de Gortari a través de su hermano Raúl Salinas.

 

Entre el 91 y el 96, la UANL se convirtió en una coladera de arpías corruptas. La renuncia de Sócrates a la Gubernatura tras haber pruebas de abuso de poder familiares, puso al descubierto la red de corrupción en la UANL. El secretario de Manuel Silos, Ovalle Faz, tenía control en el Departamento de Adquisiciones de la UANL, además era amigo y protegido del Rector. En los estados financieros de la UANL, figuraban viajes al extranjero pagados por la casa de estudios para la hermana de Sócrates Rizzo, Sandra Rizzo García, así como su esposo.

 

Ovalle Faz llego al extremo de grabar las conversaciones telefónicas de los altos funcionarios de la UANL, entre ellos Reyes Tamez, Luis Galán Wong y Carlos Garza. El responsable de realizar las grabaciones estaba haciendo contraespionaje, al servir a la prensa escrita revelándole documentos que incriminaban a Silos y a Ovalle. Tiempo después, el contacto se había suicidado. Ya había advertido del peligro en que se encontraba, ya que al parecer Ovalle lo había descubierto que estaba sustrayendo documentos oficiales. El periodista al que le revelaba la información, Héctor Hugo Jiménez, de El Norte y posteriormente del Diario de Monterrey, llamo a su domicilio contestándole la madre del sujeto; “Mi hijo no se mató, no tenía motivos”.

 

Pero bueno, como siempre, me estoy desviando del tema.

 

González Heredia había cometido espionaje junto con los Hermanos Ledezma, quienes trabajaban en el Gobierno Municipal de San Pedro. Debido al escándalo al interior de alcoholes, el Alcalde Fernando Larrazábal despide de la administración a 47 inspectores para salvar su imagen.

 

La conexión entre Larrazábal y González Heredia, comenzó desde que este último administraba los domingos la taquería Popos ubicada en Manuel L. Barragán en San Nicolás. Ahí se conocieron, y se le presento a González Heredia, al que sería el próximo Alcalde de San Nicolás, Miguel Ángel García. Posteriormente comenzó a trabajar en la administración de Larrazábal como asesor en comunicación.

 

Heredia contaba con un viejo amigo, Francisco Martínez Cárdenas, hijo del ex Gobernador Alfonso Martínez Domínguez.

 

La madrugada del domingo 18 de marzo, 17 días después de la detención de González Heredia, un vehículo Chevy es inspeccionado por policías de San Pedro en el cruce de Gómez Morín y Vasconcelos. Encuentran 13 kilos de cocaína por lo que piden el apoyo del ejército. Los militares trasladan al detenido a la PGR, quien responde al nombre de Indalecio Monárrez Pérez. Por Fidel Velázquez a la altura de Bernardo Reyes, la patrulla de San Pedro con número económico 313, va delante del convoy. La patrulla hace un cambio de luces y acelera. El cuarto vehículo del convoy que es el que traslada al detenido, rebasa al resto de los vehículos y le cierra el paso al convoy. Posteriormente comienza una balacera donde los militares son atacados por miembros del crimen organizado, quienes tratan de liberar a Indalecio Monárrez. Los militares responden al fuego proveniente de al menos 3 vehículos de reciente modelo, quienes lanzan a las fuerzas federales ráfagas de grueso calibre y granadas. Los atacantes no representan fuerza ante los militares que controlan la situación.

 

Posteriormente son detenidos 5 policías de San Pedro, quienes trasladaban al detenido en el vehículo blindado perteneciente al municipio y que comúnmente usaba Luis Cortez Ochoa, Subsecretario de Seguridad en San Pedro y operador del “Grupo Rudo” de Mauricio Fernández. Entre los detenidos se encuentran los oficiales: Fernando Santibáñez Carrillo, Marco Antonio Barrientos Ramírez, Rogelio González Campos, y José Guadalupe Pérez Arriaga, así como el asesor jurídico del municipio de San Pedro, Francisco Javier Ibarra Barrón.

 

Los oficiales de policía de San Pedro así como el asesor jurídico, trasladaban al detenido en una camioneta Tahoe, perteneciente al municipio de San Pedro. Su valor oscila los 1.8 millones de pesos por su alto blindaje y equipo táctico, quedando a disposición de los militares y terminando en custodia en un deposito fiscal.

 

El vehículo posteriormente es robado del depósito fiscal por el crimen organizado, lo utilizan para sustraer información del C-4 de San Pedro, así como de la Plataforma México, sistemas que sabe operar Luis Cortez Ochoa quien ya no labora en la corporación al momento de ser robada.

 

El 26 de junio es detenido el amigo de González Heredia “El Roy”, Francisco Martínez Cárdenas, hijo del que fuera Gobernador del Estado Alfonso Martínez Domínguez. Se le acusa de espionaje telefónico.  Mauricio Fernández Garza, Presidente Municipal de San Pedro y accionista del Grupo Alfa, declara que Martínez Cárdenas cobraba cuotas voluntarias a los antros y bares sampetrinos.

 

Tanto González Heredia como su amigo Francisco Martínez, trabajaron para el priista Rogelio Cerda Pérez cuando fue Secretario de Gobierno en la administración del Gobernador Natividad González Parás. También trabajaron con Cerda Pérez cuando fue candidato a Diputado Federal. Este los había utilizado para que hicieran investigaciones secretas a personajes de la política.

 

Con ambos, había trabajado Gerardo Ledezma, quien laboraba en la Secretaria de Seguridad Publica de San Pedro, donde trabajaba el que usaba frecuentemente la Tahoe con el equipo táctico en comunicaciones, Luis Cortez.

 

No se sabía quién había contactado a quien, si los políticos a González Heredia y su cómplice el hijo del Gobernador Martínez Domínguez, o estos a los políticos priistas y panistas que estaban cada vez más inmiscuidos en temas delictivos.

 

3 días antes de la detención de Francisco Martínez Cárdenas, Nico, el hermano menor de Ivonne Álvarez, que recién contendió por la Gubernatura del Estado, se dirigía en Guadalupe a comprar tacos junto con Abel Guerra Morales, hijo de quien busco la Gubernatura del Estado Abel Guerra Garza, amigo de Jaime Rodríguez Calderón.

 

Tanto Nico como Guerra Morales, eran socios en un negocio de reciclaje. Ese día 23 de junio, iban en compañía de una tercera persona rumbo a los tacos, cuando Nico se separó del grupo, poco antes de que Guerra Morales y su amigo fueran detenidos por policías municipales de Guadalupe a bordo de la patrulla 036, alegando que habían violado el reglamento de tránsito. Al estar arriba de la patrulla, le llamaron a Nico para informarle de la detención, y que los enviarían a ver al Comandante Romel, pero no hizo nada al respecto.

 

Más tarde, los oficiales al entrevistarse con el Comandante Romel y otros agentes, entregarían a Abel Guerra Morales y a su amigo al crimen organizado en la colonia México. Fueron llevados a una finca en Juárez donde se encontraba Esteban Luna, alias “El Chachis”. Este era hermano de Héctor Raúl Luna “El Tori”.

 

En la finca en Juárez, Abel Guerra Morales hacía fila para que lo entrevistaran. Aquellos a los que dudaban de la veracidad de sus respuestas, eran torturados en un cuarto de donde escuchaban gritos de dolor.

 

Se acercó un tipo a la fila quien pregunto.

 

¿Quién es el hijo de Abel Guerra y quien viene con él?

 

Guerra Morales y su amigo responden. Son vendados y subidos a una camioneta que se dirige al poniente de la urbe. Se meten a la colonia Obispado debido a que un convoy del ejército se traslada por Gonzalitos. El día transcurrió mientras los secuestradores los paseaban por la ciudad. Ya en la noche, “El Chachis” le menciono a Guerra Morales que había hablado con su padre, mencionándole que lo liberaría ya que lo respetaba, y que pedía reciprocidad al respecto.

 

Abel Guerra Garza se encontraba ante el llamado junto con varios mandos policiacos, entre ellos el Procurador Alejandro Garza, y el Director de la AEI Adrián de la Garza. Les advertían que en Guadalupe operaban con tranquilidad, no así en Escobedo. Ya en la madrugada Guerra Morales y su amigo fueron liberados en los límites entre García y Monterrey por la zona de Cumbres.

 

Ivonne Álvarez nunca dio los nombres de los oficiales que operaban la patrulla 036 que secuestro y entrego a Abel Guerra Morales y a su amigo a los Zetas. Incluso, suena extraño que Nico, el hermano de Ivonne, se distanciara de ellos pocos momentos antes de ser “levantados”.

 

Posteriormente, un investigador dio con uno de los oficiales que operaban la patrulla, faltando 2 oficiales por capturar. El entonces Secretario de Seguridad de Guadalupe, Ángel Fernando Pérez de León, estuvo presente en las negociaciones de la AEI para que entregaran a Abel Guerra Morales, pero Ángel Fernando Pérez, quien fuera escolta del ex Gobernador Natividad González Paras, en ningún momento pudo colaborar con información, aun cuando personal bajo su cargo fue quien inicio el rapto. Se había dirigido a la AEI ya que se había enterado que el rapto había sido en su municipio, y a sabiendas que Nico, el hermano de la Alcaldesa, había recibido la llamada del levantón por sus policías, situación que nunca le menciono a la AEI en sus indagatorias para liberar a Guerra Morales.

 

El Gobernador Natividad González Paras, no era la primera vez que se le mencionaba en sus relaciones con personas coludidas con el crimen organizado, incluso, en las calles se afirmaba que cuenta o contaba, con una serranía sembrada con marihuana en Sinaloa. En Santiago, se había hecho de tierras atrás de Bahía Escondida usando tráfico de influencias.

 

54 días después, a las primeras horas del 16 de agosto, Edelmiro Cavazos Leal, alcalde panista de Santiago, es secuestrado y posteriormente asesinado. En los primeros días de su administración pidió asesoría a Mauricio Fernández sobre asuntos de seguridad. Edelmiro había limpiado la corporación policiaca y durante su administración, se caracterizó por los asesinatos de policías de su dependencia, mismos a los que no se les rindieron los respectivos homenajes, debido a que estaban coludidos con el crimen organizado. Camionetas blancas se paseaban sospechosamente por Santiago y eran los que perpetraban los asesinatos. Al parecer, trabajaban para un grupo contrario y estaban solapados para la limpia por el entonces Alcalde, de quien se decía tenía vínculos con el Cártel de Sinaloa, mismo que estaba ligado con el Cártel de los Beltrán Leyva y el Cártel del Golfo para la aniquilación de Zetas. De todos era sabido que el Cártel de los Beltrán operaba en San Pedro, municipio neutral para los Capos, y donde operaba el famoso Grupo Rudo de Mauricio Fernández.

 

Volviendo a Fernando Larrazábal, no sería la última vez que estaría muy cercanamente ligado al crimen organizado, poco más de un año después de la detención de Francisco Martínez Cárdenas por los Marinos, el 25 de agosto del 2011, se daba el ataque al Casino Royale al negarse a pagar cuotas al crimen organizado.

 

El Presidente de México Felipe Calderón, decretaría 3 días de luto nacional. El atentado hizo eco ante el Secretario de la ONU, Ban Ki-moon, quien lo califico como: “Un acto deplorable de violencia”. Amnistía Internacional exigía una profunda investigación de los hechos, mientras Larrazábal se veía atrapado ante su hermano quien supuestamente cobraba sobornos al dueño del casino. 

 

Se movieron todos los aparatos de seguridad para dar con la pesquisa de los atacantes. No hubo resultados.

 

En un conjunto habitacional de clase media, la colonia Las Lomas, misma que pertenece al municipio de García, un convoy sospechoso deambula por sus calles. Jaime Rodríguez Calderón, alcalde de ese municipio y hoy Gobernador electo del Estado, había implementado un sistema con líderes vecinales al que llamaba “Águila”. Se trataba de una red de espionaje civil donde se reportaban actividades sospechosas directamente al Secretario de Seguridad del Municipio, así como al Alcalde. El convoy estaba ubicado y ante el llamado de los civiles, el Grupo de Reacción del Municipio de García, uno de los más temibles en la metrópoli, hizo acto de presencia. En un baldío encontraron a varios hombres maniatados con sus rostros cubiertos. Eran parte del personal del grupo criminal que había atentado contra el Casino Royale. Sus mismos compañeros los querían silenciar para que la pesquisa no llegara a las diversas células que operaban la metrópoli, pero no pudieron terminar su trabajo ante la inminente llegada del Grupo de Reacción. La cacería comenzaría con esos primeros hombres, quienes habían delatado a más de 3 docenas de delincuentes.

 

Las pesquisas siguieron y le toco ser aprehendido por la PGR a Adalberto Madero, ex alcalde de Monterrey por el PAN, debido a que supuestamente estaba vinculado con el consejo de administración de la empresa que manejaba el Casino Royale.

 

El hermano de Fernando Larrazábal, 6 días antes del ataque, había recibido 400 mil pesos por parte de un par de empleados del casino, alegando en las investigaciones que supuestamente eran por concepto del pago de la venta de unos quesos. Seria conocido después como “El Señor de los Quesos”.

 

Ivonne Álvarez heredaría la administración de Guadalupe por parte de Cristina Díaz, aquella mujer que quedo muy por debajo de Jaime Rodríguez Calderón, en la elección por la dirigencia del PRI y en la cual, surgió el apodo de “El Bronco”.

 

Jesús Garza Villarreal, Secretario Administrativo de Guadalupe, al que todo mundo lo apoda como “El Tío”, maneja a su antojo la administración, junto con Ismael Flores Cantú, líder de la CTM, quien funge prácticamente la función de vicealcalde. Junto con ellos, el Secretario de Ayuntamiento Gabriel Tláloc Cantú Cantú, manejan a su antojo la administración, este último en su puesto desde la administración de Ivonne Álvarez, y del actual Alcalde Cesar Garza, donde trabaja el sobrino de Ismael Flores, Marcos Duran Flores como Secretario de Finanzas y Tesorero Municipal, así como otro familiar de Ismael, Saúl Ramírez Flores, como Secretario de Obras Publicas y Desarrollo Urbano, aunado al Secretario de Servicios Públicos, Ovidio Campos Tamez, un colaborador cercano a Ismael Flores por varios años.

 

Cristina Díaz había entregado la administración a Ivonne Álvarez infestada de Zetas, su conecte con el grupo delictivo, se trataba de su amante Anuar Michel Gerala. Lo anterior, había sido solapado por el vicealcalde de Guadalupe, Ismael Flores.

 

Ismael Flores había querido imponer a su hijo Oscar Flores Treviño como precandidato a la Alcaldía de Escobedo por el PRI, para contender en las elecciones del pasado día 7, pero el Gobernador Rodrigo Medina impuso a Clara Luz Flores, esposa de Abel Guerra Garza quien estaba sumamente enemistado con la CTM, como su fiel amigo Jaime Rodríguez Calderón.

 

El 11 de enero del 2012, el entonces Alcalde de García Jaime Rodríguez Calderón, atrapo al Z-44 en los límites de Nuevo León y Coahuila en compañía de sus escoltas. En aquella captura dada por casualidad, debido a que Jaime Rodríguez se encontraba con licencia trabajando en su rancho de Paredón, el convoy marchaba por la terracería mientras vieron vehículos sospechosos en una finca. Se adentraron los escoltas del Alcalde sometiendo a varias personas que se encontraban haciendo una carne asada. Entre ellos se encontraba el “Z-42”, Omar Treviño Morales, que había escapado adentrándose al monte.

 

La Secretaria de Seguridad Publica se blindaba ante la llegada del número 3 en el ranking de los Zetas, que había querido sobornar a los escoltas con 15 millones de pesos. José Luis Sarabia, alias: Pepito Sarabia, Comandante Pepito, Diablo, o Z44, era compadre de Miguel Ángel Treviño Morales, alias “El Z-40” y este, hermano de Omar Treviño Morales, el “Z-42”.

 

Mientras se encontraba custodiado en las celdas municipales, el alcalde le urgía a la 7ma. Zona Militar para que fueran por él. La ciudad había sido blindada por retenes de la Policía de García para evitar su rescate, pero el General Alfredo Flores Gómez, le insistía a Jaime Rodríguez que lo entregara a la Policía Ministerial. No haciéndole caso al General, Jaime Rodríguez mantuvo al Z-44 bajo las celdas municipales toda la noche. Al día siguiente, más de 40 vehículos entre Marinos y Militares, estos últimos que se habían unido al convoy para no quedar mal, trasladarían a José Luis Sarabia a la PGR en Escobedo, para posteriormente subirlo en un avión en el Aeropuerto del Norte rumbo a la SIEDO en la cd. de México.

 

El General Alfredo Flores renunciaría a su Comandancia en la 7ma. Zona Militar, para fungir como Secretario de Seguridad Publica en la administración del Gobernador Rodrigo Medina.

 

Coincidentemente, 44 días después de la captura del Z-44, una narco manta seria colocada frente a la clínica 33 del IMSS en Félix U. Gómez. En ella se acusaba al Gobernador Rodrigo Medina de haber recibido 20 millones de dólares para su campaña a través de un familiar del ex Secretario de Seguridad Aldo Fasci Zuazua. También se mencionaba que se le habían pagado gastos de campaña a través de Agustín Serna de la CROC.

 

Las mantas las firmaban Heriberto Lazcano y Miguel Treviño, el Z-40, hermano del 42 y compadre del 44.

 

Aldo Fasci declaraba que las mantas tenían un trasfondo político. No era la primera vez que eso sucedía, a Jaime Rodríguez Calderón de cuando era alcalde, ya lo había amenazado el PRD de la misma manera, haciéndose pasar el partido por el crimen organizado que controlaba García.

 

En el sexenio del Gobernador Rodrigo Medina, hubo un quiebre entre este y la CTM de Ismael Flores. Flores amenazaba con romper relaciones con el PRI, ya que como mencione, quería imponer a su hijo en la alcaldía de Escobedo, pero recibió una llamada de la ciudad de México, del mismo Secretario de Gobernación del Presidente Enrique Peña Nieto, Miguel Ángel Osorio Chong, que lo había puesto en su lugar.

 

Tengo un rumor, que existe una relación desconocida entre Peña Nieto y Clara Luz, la actual Alcaldesa electa de Escobedo y esposa de Abel Guerra Garza. Nació en Monclova Coahuila, desde muy pequeña fue trasladada por sus padres a Sabinas Coahuila, donde supuestamente, tiene un conecte con Peña Nieto, que por más que intente no pude relacionar, como lo hicieron los Kennedy con el camarada de Kruschev en Washington, que fue el enlace crucial para evitar la guerra nuclear en la crisis de los misiles en octubre del 62.

 

Anyway…

 

El 6 de marzo del presente año, en la calle Vía Colatina 514 en la colonia Fuentes del Valle, seria aprehendido por fuerzas militares de elite, Omar Treviño Morales, el Z-42, aquel que se había escabullido en el monte ante la presencia de los escoltas de Jaime Rodríguez Calderón.

 

El Alcalde del municipio de San Pedro, Ugo Ruiz Cortes, quien lo precedía como alcalde Mauricio Fernández, y que ahora al mismo Mauricio lo precedía Ugo Ruiz, declaraba que no sabía de la presencia de Omar Treviño por su bajo perfil, a pesar de que usaba un par de helicópteros en un helipuerto privado en San Pedro.

 

Conocido como la Casa Verde, el helipuerto era utilizado por los CEO`s de las empresas regiomontanas. Los helicópteros del Z-42, eran rentados a Gobernadores y prominentes políticos en funciones.

 

Ugo Ruiz no llevaba “H”, así de ausente y titereteado era su mandato como Alcalde de San Pedro. Lo más sorprendente, es que la ciudadanía culta, letrada y estudiada de San Pedro, había vuelto a elegir como Alcalde a Mauricio Fernández Garza. Quizás porque sabían que desde hace siglos, mandaban los Garza Sada, los Muguerza, los Zambrano, los Garza Fernández, los Garza Lagüera, así como los descendientes legalizados moralmente por la iglesia, aun bajo el pecado del incesto.

 

Llegarían las elecciones para Gobernador. Jaime Rodríguez como candidato independiente arrasaría en las encuestas y ante su virtual triunfo, fue llamado a la cd. de México por la Secretaria de Gobernación. Aparentemente se entrevistaría con Osorio Chong, pero existen rumores que su entrevista había sido con el mismo Presidente de México, Enrique Peña Nieto…

 

Ningún medio de comunicación se atrevió a preguntar.

 

 

La historia, la historia volvía a escribirse, y el tiempo nos diría si para bien, o para mal, ya que eran parte de conflictos de intereses.