Capítulo 1. Concertacesión.
El origen natural de las cosas nos remonta al matrimonio de Rómulo Garza Guajardo y de Guadalupe Guerra
Espinoza, ambos tienen a Rómulo Garza Guerra, quien se casa con Benigna Esperanza Garza González. Ambos, tienen a Alfonso Garza Garza, quien se casa con Susana Sada Narro.
Susana Sada Narro viene de Jesús Sada Muguerza y de Sara Narro Gómez. Jesús Sada Muguerza de Francisco
Cirilo Tiburcio Sada Gómez y de María del Carmen Muguerza Crespo.
Ahora bien, Alfonso Garza Garza y Susana Sada Narro se casan y tienen a Gerardo Garza Sada que es el
personaje que abre este primer capítulo.
Debo señalar el linaje de Gerardo Garza Sada, para descartar su origen en el clan emblemático de
Monterrey, los Garza Sada. Sobre todo, porque en próximas líneas nos enfocaremos en los personajes que vienen de Don Roberto Garza Sada, hermano de Don Eugenio; mismos que están desarrollando el
futuro político de nuestro país debido al quiebre de las instituciones y el desequilibrio social.
Nos encontramos en 1994, son tiempos en que la Presidencia se disputa por Ernesto Zedillo y Diego
Fernández de Ceballos. En Monterrey, contendrá Jesús Hinojosa Tijerina con Jorge Manjarrez Rivera.
Existe fraude en las elecciones regiomontanas; Jorge Manjarrez del PRI queda elegido. Jesús Hinojosa se
planta en los bajos del Palacio Municipal en señal de protesta, es donde entra en escena su coordinador de campaña, Gerardo Garza Sada.
Gerardo Garza Sada gestionaba por la vía política arreglar el asunto del fraude, donde había cientos de
actas alteradas. Al no obtener respuesta opto por la vía mediática al dirigirse con Federico Arreola, quien era asesor editorial del Diario de Monterrey.
A Federico le entrego copia de más de 700 actas como prueba del fraude electoral, por lo que los
reporteros del Diario de Monterrey se dieron a la investigación dentro de los que se encontraba Mario Alberto Palacios.
El Tribunal Estatal Electoral rechazo las impugnaciones del PAN, por lo que el equipo legal de Acción
Nacional se avoco a anular casillas las cuales revertiría la ventaja del PRI.
Al verse copados por todos los frentes, se reunió el Presidente Nacional del PAN Carlos Castillo Peraza
junto con su secretario Felipe Calderón Hinojosa, y el secretario estatal del PAN Raúl Monter Ortega.
El equipo de panistas se dirigió a la Secretaria de Gobernación para entrevistarse con el Ministro Jorge
Carpizo McGregor, ex procurador de la Republica, ex presidente de la CNDH y ex Rector de la UNAM.
Jorge Carpizo fue tajante ante sus entrevistados quienes ya le habían mostrado todas las pruebas y que
además, habían referido para dicha entrevista tener argumentos políticos.
“¿Y cuáles son sus argumentos políticos para reconocerles Monterrey?”.
Raúl Monter le entrego un sobre tamaño oficio. Dentro de el, se encontraban decenas de fotografías con
escenas explicitas sexuales de toda índole de personajes del PRI.
“Monterrey es suyo”. Les menciono el Secretario de Gobernación.
El inicio de las concertaciones se remonta al 88, cuando Diego Fernández de Ceballos valida las
elecciones que le “dan” el gane a Carlos Salinas. Aquello tan vil y cruel en la vida política del país, quizás tenga como fondo la privatización de la banca, la posterior quiebra de la misma y la
deuda privada convertida en publica; la famosa FOBAPROA. Cabe señalar, que en el Salinismo incrementaron sustancialmente su fortuna personajes cercanos a Salinas, como Slim o el mismo Alfonso
Romo.
Del 88 a la fecha, hemos vivido un sinfín de acuerdos entre las diversas corrientes políticas del país,
mismas que han deteriorado sustancialmente el sistema político mexicano. Si bien ha servido para reforzar las instituciones, la corrupción ha salido avante debido al amparo de los acuerdos que
incluso, llevan al descaro a los personajes políticos a seguir viviendo del erario. A todo eso le llamaron alguna vez democracia, que al poco tiempo se le renombro a alternancia.
En esta segunda temporada de “Crónicas de política y chingadera y media”, haremos honor al título de esta
serie al señalar a los personajes que han saqueado al país, violentado e incluso traicionado; y que nos han llevado a las decisiones tomadas hoy en día por el Grupo Monterrey para guiar a la
nación a mejores bríos ante la incertidumbre social, internacional y empresarial, para el buen sostenimiento de la nación.
Si bien el Grupo Monterrey se dividió en el 74 tras las diferencias operativas entre Eugenio Garza
Lagüera y Bernardo Garza Sada, la guía política del Grupo no murió con Don Eugenio Garza Sada.
Bernardo Garza Sada encabezo al Grupo Monterrey para la firma de la “Alianza para la Producción”; un
programa integral del Presidente López Portillo para rescatar el país del bache en que había caído gracias a Echeverría.
El programa sonaba congruente pero estaba mal organizado, sobre todo por la confianza que el Estado le
aposto al petróleo.
En primera se contrajo deuda gracias al descubrimiento de nuevos yacimientos de petróleo. Si bien el
petróleo estaba alto, una situación totalmente ajena al país hizo que cayeran los precios. Para esto el gobierno gastaba gran parte de sus ingresos por petróleo en exploración e infraestructura
petrolera, además del crecimiento del aparato burocrático.
El papel del sector empresarial encabezado en Monterrey por Bernardo Garza Sada para con la “Alianza para
la Producción”, era endeudarse para fomentar la inversión, otro esquema del programa que incluía aumentar el empleo, e impulsar la modernización del aparato productivo.
ALFA entro al borde de la quiebra y fue rescatada por el gobierno de López Portillo, quien en más de una
ocasión durmió en los aposentos de los Garza Sada en la Ventura, en San Pedro Garza García.
Hay que recordar que las diferencias entre Eugenio Garza Lagüera y Bernardo Garza Sada eran operativas.
El Grupo Monterrey se dividió más no los intereses de sus anteriores líderes tras el retiro de Don Eugenio y Don Roberto Garza Sada.
Recordemos la escena de Alfonso Martínez Domínguez en los adentros de FEMSA cuando se dirigió a ellos
para ver si podía mediar el conflicto entre Eugenio Garza Lagüera y Javier Garza Sepúlveda.
Se retira Bernardo Garza Sada y Eugenio Garza Lagüera. Al primero lo sustituye Dionisio Garza Medina y al
segundo José Antonio Fernández Carbajal.
El primero retirado un tanto de la escena política, se enfoca a reformar ALFA convirtiéndola en un
conglomerado multinacional. El segundo si bien si crece pero no de manera significativa, se interesa en la política debido a sus intereses financieros en Bancomer y recursos hidráulicos de Coca
Cola FEMSA principalmente.
La salida de Dionisio Garza Medina da comienzo a una nueva era en ALFA, donde entraría Armando Garza Sada
como capitán del holding regiomontano.
La diferencia entre las capitanías de ALFA y FEMSA varía enormemente debido al perfil de los herederos de
ambos emporios.
La familia de Don Eugenio Garza Sada un tanto tradicional ha pasado la batuta del emporio por herencia,
lo cual ha dado a pie a que sus descendientes se enfoquen a la inversión descartando el lado operativo a excepción de Eugenio Garza Lagüera. Del lado de Don Roberto los descendientes son más
operativos lo cual, da pauta a tener diferencias entre las familias.
Es lo que podríamos pensar que pudo haber llevado a la renuncia de Dionisio Garza Medina de ALFA; sobre
todo por la forma en que se concursó su llegada, donde incluso el mismo Mauricio Fernández Garza se interesó en el puesto.
Es difícil renunciar a la capitanía del conglomerado que deseaste dirigir desde tu adolescencia. Dejarlo
así sin más, da pensar en los motivos que originaron la decisión de Dionisio.
Si bien la versión oficial es el retiro voluntario, toda una serie de situaciones que llevaron a ese
“retiro” cuadran con la versión de Garza Medina, pero no del todo a su intenso trabajo actual en sus empresas personales.
El motivo oficial que origino su renuncia, viene a raíz del alza en los créditos subprime en el periodo
del 2004 al 2006, los cuales trajeron como consecuencia la crisis de las hipotecas subprime, y que desembocó en la crisis financiera del 2008. Es en septiembre de ese año cuando Dionisio “decide”
dejar ALFA, haciéndolo público en la asamblea de accionistas de ALFA el 26 de mayo del 2009.
Si bien a muchas empresas la crisis las tomo de sorpresa, los diversos factores que llevaron a la misma
eran de todos sabido, cometiendo el departamento de tesorería de ALFA el error de confiarse en sus previsiones de los instrumentos derivados de cobertura lo cual llevo a la compañía a perder 637
millones de dólares, mismos, que pusieron a Dionisio a rescatar el holding con medidas drásticas de ahorro ya que sabía que gracias a la quiebra de Lehman Brothers el crédito se limitaría para
contrarrestar el error financiero interno. El intenso trabajo de Dionisio coordinando a todos los directores quienes también hicieron lo imposible, pudieron sacarse de la manga 800 millones de
dólares.
El inmenso “error a consecuencia”, del departamento de tesorería de ALFA, le costó las diferencias en la
familia a Dionisio ya que vieron en riesgo sus inversiones. Esto aunado a la cerrazón de comunicación de Dionisio para con ellos, enfocándose solo en sus informes anuales.
Se preguntaran ¿qué demonios tiene que ver esto con la serie Crónicas de política y chingadera y media?
Partiendo de que la familia es la base de la sociedad, en este caso es el perfecto ejemplo.
El Grupo Monterrey ha tomado una nueva forma e imagen; ahora conocido como el Grupo de los 10, tiene
múltiples capitanes quienes van sobre los mismos objetivos en conjunto y diversificando sus obligaciones e intereses. El poder centrado en un solo personaje como Don Eugenio Garza Sada, ahora se
ha multiplicado influenciando incluso internacionalmente.
El Grupo Monterrey moderno se conforma de la siguiente manera.
Tomas González Sada; Cydsa.
Sergio Gutiérrez Muguerza; Deacero.
Eduardo Garza; Frisa.
Enrique Zambrano Benítez; Proeza.
Eugenio Garza Herrera; Xignus.
Julián Eguren; Ternium.
Manuel L. Barragán Morales; Arca Continental.
Juan González Moreno; Gruma.
Rogelio Zambrano; CEMEX.
Adrián Sada González; Vitro.
José Antonio Fernández Carvajal; FEMSA.
Armando Garza Sada; Alfa.
Tras imponer a Vicente Fox y posteriormente a Felipe Calderón, aceptan la llegada del PRI con la
condición de sacar adelante las Reformas.
La veda priista trajo como consecuencia el incremento en la corrupción actual, obteniendo el
financiamiento propio por medio de los gobiernos estatales y algunas instituciones. El declive social hizo que el Grupo Monterrey entrara de nueva cuenta al ruedo, en esta ocasión también
impulsados por la imagen de Alfonso Romo quien se les había adelantado.
Alfonso Romo enamoro a López Obrador con la idea de apoyarlo en la transformación del nuevo México,
convirtiéndose en el artífice del proyecto de nación de Morena.
Las diferencias empresariales entre Romo y Alejandro Garza Lagüera, hicieron que el Grupo Monterrey no
mirara con buenos ojos la figura de Romo ante el proyecto político de López Obrador.
Para esto, existe una estrecha relación entre Alfonso Romo con Carlos Salinas de Gortari, mismo que había
reconocido que era su amigo. Así sin más, López Obrador al ser cuestionado al respecto, contesto que “los amigos de mis amigos son mis amigos”.
Al ser lanzada la reforma fiscal a finales del 2013, Armando Garza Sada la aprobó ampliamente. El capitán
de Alfa mantenía una estrecha relación con el entonces Secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Alfonso Romo conoció a López Obrador en tiempos del bloqueo de Reforma por parte de simpatizantes de
López Obrador, siendo presentado por Dante Delgado.
Dante Delgado encabezo la creación del partido Convergencia a manos de Enrique Herrera Brunquetas, mismo
que mantuvo una relación cercana al Presidente Echeverría en materia de manipulación de información tras los eventos de Tlatelolco en el 68.
Convergencia posteriormente cambio sus estatutos convirtiéndose en Movimiento Ciudadano.
Tras la llegada a la alcaldía de Monterrey el PAN vía Jesús Hinojosa Tijerina, comenzó una carrera
vertiginosa en sus filas locales comenzando a formarse grupos que terminaron resquebrajando su estructura en aras de tener más poder y hacerse de capitales vía la
corrupción.
Las diferencias al interior del PAN local, llevo la salida de Fernando Elizondo terminando en Movimiento
Ciudadano lanzándose por la gubernatura del Estado.
Al verse ampliamente superado, Fernando Elizondo se alía al personaje del momento y líder en las
encuestas, Jaime Rodríguez Calderón. A Jaime Rodríguez lo apoya para su campaña José Antonio Fernández Carvajal (FEMSA). Su contra parte Ivonne Álvarez, es apoyada por Rogelio Zambrano (CEMEX) y
por Armando Garza Sada (ALFA); más por imagen y mantener las apariencias. La misma Senadora Cristina Díaz estaba a favor de Jaime Rodríguez Calderón debido a que sabía de sus conectes con Carlos
Salinas de Gortari y los planes generales del ex presidente.
A Movimiento Ciudadano llega Samuel García Sepúlveda, quien marca una diferencia en la legislación local
en ocasiones a favor y otras en contra del gobierno que encabeza Jaime Rodríguez Calderón.
Tan pronto Samuel García denuncio ante La Haya los crímenes de lesa humanidad de Javier Duarte, ex
gobernador de Veracruz, se sabía por ese hecho de sus intenciones por una senaduría. Días después se destapo pero pronto fue bajado de la nube al serle notificado que el PAN haría una alianza con
Movimiento Ciudadano en cara a las elecciones del 2018, y que no estaba considerado como candidato a ese puesto.
Siendo dirigente estatal de Movimiento Ciudadano y no estar enterado de dichos acuerdos nacionales del
partido, dice mucho de la quiebra en la relación entre él y Fernando Elizondo, sobre todo, porque el ex coordinador ejecutivo del gobierno de Jaime Rodríguez se vio en el acuerdo entre PAN y PRD
por el Frente Amplio Opositor rumbo al 2018. No le quedaría de otra a Samuel que sumarse a Morena.
Dicho acuerdo lo encabezo Gustavo Madero donde se sumaron personajes de la talla de Santiago Creel, Jorge
Castañeda, Cuauhtémoc Cárdenas, Agustín Basave y Porfirio Muñoz Ledo en el llamado Encuentro Chihuahua.
En la segunda semana de febrero del presente, un emisario de Morena se reunió con Armando Garza Sada. En
la reunión el CEO de Alfa le comento al enviado que retirasen a Alfonso Romo del equipo de apoyo de López Obrador y que en su lugar, colocasen a Adolfo Helmut, que ya en el 2012 había elaborado
el plan económico de Morena.
Armando Garza Sada le manifestó el sin fin de problemas financieros en los que ha participado Romo y su
quiebre con su suegro Alejandro Garza Lagüera.
Para esto, quien sigue a Romo es su mano derecha en todas sus fortunas y decepciones a lo largo de su
carrera empresarial, Adrián Rodríguez Macedo, quien ocupa el lugar en el equipo de López Obrador que alguna vez tuvo Adolfo Helmut.
Adrián Rodríguez Macedo fue director financiero de Pulsar Internacional, así como director alterno de
Savia y Seminis, consejero independiente de Empaques Ponderosa y vicepresidente de la Universidad Metropolitana de Monterrey.
Resta solo investigar la decadencia de Pulsar para darse cuenta del porque el Grupo Monterrey no acepta a
Romo en las filas de López Obrador, a quien considera virtual ganador rumbo al 2018.
Con esta cita en febrero, Armando Garza Sada le extendía la mano a López Obrador con la clara condición
de retirar a Romo, quien tanto ayudo a Morena a tomar la confianza de los empresarios nacionales cambiando por completo la imagen de Andrés Manuel.
El Grupo Monterrey al aventar las cartas, se reunió con Carlos Salinas de Gortari entre el mes de junio y
julio donde en apariencia, acordarían las condiciones en las que se daría el cambio “democrático”.
Ya para entonces había un acuerdo previo para que el Estado de México quedara en manos del PRI robándole
las elecciones a Delfina Gómez, candidata de Morena. Andrés Manuel López Obrador no hizo nada por apoyar a su candidata en su lucha legal para impugnar las elecciones. Parte del acuerdo sería no
tocar al Grupo Atlacomulco dándole amnistía al PRI a cambio de dejarle paso libre a Morena para el 2018.
Al verse solo, Samuel García se reunió con López Obrador en la reciente visita a Monterrey no
“descartando” una alianza entre Movimiento Ciudadano y Morena de cara al 2018. Lo cierto es que no tenia de otra al ser sacado de la jugada quizás por el mismo Fernando Elizondo
Barragán.
El Encuentro Chihuahua tiene múltiples rostros que lo único que sugieren, es que gran parte de las
elecciones estatales, las diputaciones locales, alcaldías y demás puestos de elección popular, tendrán una tendencia a la alza para el PRD, PAN, así como para Movimiento Ciudadano con la
intención de dejar el camino libre a López Obrador.
Para esto, personajes del Grupo Monterrey se reunieron con López Obrador en su reciente visita a la
ciudad, donde le informaron la entrevista que sostuvieron con Salinas y donde le confirmaron que el PRI lanzara como candidato a Luis Videgaray.
El perfil político del país aún se está gestando en estas semanas, donde los acuerdos y alianzas son
marcadas según los intereses del Grupo Monterrey, donde Armando Garza Sada apoya condicionalmente a López Obrador, y este aun hoy en día tiene la figura de Alfonso Romo, que ha sumado en el
proyecto de nación a Dionisio Garza Medina.
Coincidentemente Dionisio Garza Medina, gano la licitación de 6 de los 7 bloques concursados para la
extracción de gas shale. En uno se alió con la canadiense Sun God y en 5 participo solo con la empresa creada en 2014, Jaguar, Exploración y Producción.
Para dicha aventura de inversión, Dionisio tendrá que reunir 500 millones de dólares que se suman a los
55 ya desembolsados por dicho concurso. Los 500 millones son los proyectados para la infraestructura de explotación aun manteniéndose en duda, si cotizara en la bolsa o sacara de su
cartera.
En dicho concurso también participo y gano algunos bloques Carlos Slim con la empresa Carso Oil and
Gas.
Newpek, empresa de Alfa quien opera 756 pozos en producción en los Estados Unidos y México, fue madrugada
por la empresa de Dionisio Garza Medina.
Todo indica que las diferencias en la familia están definiendo el plan político para el 2018 teniendo dos
corrientes, una liderada por Armando Garza Sada y otra por Dionisio Garza Medina; teniendo como resultado una victoria segura a favor de Andrés Manuel López Obrador por la Presidencia, y siendo
aún discutidos los planes para la repartición de todos los demás puestos de elección popular.
Obteniendo lo que quería Dionisio, lo más seguro es que Alfonso Romo se salga del proyecto de López
Obrador avalado por Carlos Salinas, y orquestado por Armando Garza Sada quien representa a la poderosa Alfa, misma que lidera al Grupo Monterrey.
Continuara.